miércoles, 2 de abril de 2014

MADRE Y MAESTRA



El pasado sábado 29 de marzo se pronunció el Magno Pregón de la Semana Santa de Ciudad Real en el Teatro Municipal Quijano, a cargo de D. Jesús Torres Martínez.  A continuación reproducimos el fragmento dedicado a nuestra Cofradía:

MADRE Y MAESTRA

Madre y maestra… la Hermandad donde el pregonero vivió su juventud cofrade, donde definitivamente le fue inoculado el veneno… ¡bendito veneno! Ese que sin antídoto posible nos hace soñar con un compás flamenco, una ropa bien hecha y una recogida que nunca termina… Madre y maestra.

El estilo que más tarde asumimos todos, y que refleja un respeto absoluto por la liturgia, por el orden, por la seriedad en su puesta en escena y, ¿por qué no? Por la representación alegre y artística de la belleza y del gozo del misterio de la Redención del hombre, ha sido desde su fundación –hace ya 31 años- ejemplo de amor incondicional a sus Titulares, de vida plena de hermandad durante todo el año, y de búsqueda permanente de la excelencia.

Lo demuestran sus impresionantes altares de culto, monumentos efímeros de la Fe, donde la mano de los priostes deja cada año su ofrenda particular al Hijo de Dios y a su Santísima Madre. Lo demuestran sus triduos, quinarios, funciones, Rosarios de la Aurora, traslado solemne, y los innumerables actos religiosos celebrados a lo largo de todo el año. Y lo demuestra su brillante salida procesional.

El pregonero pasó 12 preciosas primaveras bajo el sufrimiento de un Cristo torturado, y la mayor parte de ellas bajo los cascos de un romano corcel y al calor de un zanco de madera… ¡me invade la nostalgia! No se olvida así como así la raza costalera de una cuadrilla sin igual, ni los dulces andares de la Señora ya de vuelta hacia el innombrable… Y es que… cada cosa en su sitio… no merece ninguna Cofradía salir de una cochera… por mucho que se haya querido dignificar un lugar, más que apropiado para ensayar, pero poco o nada para realizar una Estación de Penitencia como Dios quiere y manda.

Las cofradías ha de salir de su lugar natural, que no es otro que el Templo donde están incardinados sus Sagrados Titulares y donde reciben culto, llantos, agradecimientos y plegarias todos los días del año. Si las características arquitectónicas de las desafortunadas construcciones del difunto siglo XX no permiten la salida de los pasos, éstos habrían de salir, al menos según mi humilde criterio, del lugar más cercano posible al Templo… un lugar sencillo, sin innecesarias ostentaciones… pero en la Parroquia o junto a ella, de manera que la profesión de Fe que representa una Estación de Penitencia no pierda ni un ápice de la solemnidad que ésta merece.

Permíteme manchego… que hoy sueñe despierto…


Yo tengo en Santo Tomás
dos amores escondidos
y es mentarlos nada más
y es sentir escalofrío

Uno atado a una columna
un Jesús Bueno y herido
la otra… una azucena
Consuelo del afligido

Una noche de septiembre
por el cansancio vencido
con la mente casi en blanco
rezando quedé dormido

Entre el sueño y la vigilia
a dos estampas asido
duermevela en que se mezclan
deseo, sueño y olvido

Y en este sueño que os cuento
-no es quimera ni espejismo-
una Hermandad que tiene
el buen gusto por castigo

Una puerta fea de grande
empieza un nuevo camino
al otro lado del parque
suena la Banda del Cristo

Vienen a paso ordinario
anunciando lo divino
casco y pluma, llanto alegre
o soplando, que es lo mismo

Ya está todo preparado
El Senatus, los martillos
las potencias del Señor
y el flagelo de castigo

Cruz de Guía y sus faroles
bacalao corporativo
y las flores de azahar
“ora pro nobis” inscrito


Capataces, costaleros
Nazarenos, monaguillos
¡esto es una cofradía!
¡todo lleno de chiquillos!

Don Eugenio Sánchez Vega
desde su palco divino
disfrutando en esta tarde
igual que si fuera un niño

Ya está todo preparado
relinchando hasta el equino
el misterio está en la puerta
el Sol está de testigo

Y en mi sueño que es real
no es quimera ni espejismo
la Hermandad ya está de vuelta
se ha pasado en un suspiro

Mil capirotes blancos
que deshacen el camino
mil corazones puros
de los que siguen a Cristo

La Bondad: sobre los pies
sobran fuerzas, sobra brío
el izquierdo por delante
derrochando poderío

Entre blondas de hermosura
un corazón herido
no hay Consuelo para Ella
¡están matando a su Hijo!

No me dejes que despierte
yo quiero seguir dormido
y seguir en este sueño
¡o que se cumpla ya mismo!

Déjame dulce señora
Consuelo del Aflijido
que despierte de este sueño
¡cruzando el parque contigo!